miércoles, 26 de septiembre de 2012

Ruinas de Desesperacion

Años y años, pasan,
sin estar en calma,
sin estar en paz,
no me libero del mal.

El cielo huye al sonido
que provoca el ruido
de esas espadas asesinas
que la sangre derraman.

Desesperación, desesperación,
ya las guerras no son la solución,
se acaba la gente con todo y mundo,
se pierde todo y se pierde el rumbo.

Por reyes y reinas que no gobiernan
el mundo desespera por el bienestar
que nunca llega y nos engaña
con una aparente y enferma calma.

Al mar, al mar debemos ir,
donde las olas nos llevan
no hay camino, no hay fin,
solo navegamos hasta morir.

El sol nos acompaña
en esta aventura solitaria,
en esta vida que no elegimos
en este recinto, el mundo.

Las antiguas vidas nos enseñan
a no repetir las mismas tragedias
a las que los errores nos desdeñan
y entre siglos nos olvidan sus paginas.

Donde vagaremos despues del fin,
en que lugar viviran los hijos
del eterno y acaecido pecado
que entre estas ruinas habitaron.

Hemos perdido, ¡Oh! almas pobres!
Que el desdichado destino nos jugò mal
y nos han condenado al infame final
donde la desesperaciòn en ruinas esta.

A.T.



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