Ese sueño que me atrapó
en incertidumbre desesperada,
entre mis sabanas y mi almohada,
en una eterna madrugada,
en una pena muy callada,
en una realidad alterada,
al que llegue sin rumbo
y desde la nada,
el que me hizo creer
en una muerte inesperada,
en que la sonrisa era borrada
de manera inusitada,
en que ella era desvanecida
de la fantasia de mi vida,
en alguien que no existia
tal vez solo en mi cabeza
o en mis oscuros días
en que te necesitaba
aunque fueras efímera
en lo que al final era un sueño
perdido en la luz del día.
A.T.
No hay comentarios:
Publicar un comentario