martes, 15 de enero de 2013

Unos

Un respiro que tomo ahora
al salir un sol que me levanta
con una luz hiriente en mis ojos,
entonces caigo al mundo de un salto
y veo todo a mi alrededor.

Una habitación que contiene:
una cama, un ropero, una silla
y un escritorio, y sobre él: un lapíz,
una página en blanco y un deseo.

Un par de botas, unos pantalones,
un cincho, una playera y un camino
que espera como siempre ser andado
por unos pies cansados que no se rinden.

Una sombra, una penumbra del día,
una comida, una vida compartida,
acaso un abrazo para no extrañar,
un abrazo con calor fraternal.

Una costilla que nos haga compañia,
¿Será una metáfora o una cruel mentira?
una desdicha quizá, una traición, un amor,
una flecha al corazón, una fría compasión.

Un nacimiento inminente, un ángel que muere,
una cuna que se vuelve entierro prematuro,
un llanto sincero, ignorante y puro,
crece en un mundo desesperado como duro.

Allí en el inicio de un segundo estamos
revistiendo el reloj con terciopelo,
cambiando agujas y tapando agujeros,
comienza un añejo mes de enero.

Unas palabras, una voz que pronuncia
cantos antiguos de un alterno ritual,
un verso sin épocas, un poeta muerto
que vive entre bocas que le recuerdan.

Un viento permanente soplando velas,
un adiós constante de horas venideras,
una tumba siniestra de un santo encierro,
y un te quiero que sigue soltero.

A.T.

1 comentario:

  1. Alfredooo, me encantó a partir del verso 5 (aunque no sé muy bien el concepto de verso), pero ponele " estrofa" 5ta jajaja ( así se entiende). Cuando comenzé a leerlo pensé " WTF?"y luego se vio más la onda de tu estilo...Super lindo el final...muy sabinesco , me encantó. Besotee

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