martes, 14 de julio de 2015

La mujer en el infierno

















Bajó la mujer al infierno
A empeñar el corazón
Por un gramo de belleza
Y una onza de falsedad.

Paseó por los llanos
De palpitantes llamas
Llenándose de jocosidad
Al desdeñar al amante.

Buscó su fortuna
En los vacíos brazos
De la ilusión del amor,
Y se maldijo por el dolor.

Cruzó los mares ardientes
De la pasión desmedida,
Surcó cielos oscuros
En medio de su locura.

Y llegó al borde de la condena,
Donde es libre para saltar,
Pero aún así lleva cadenas,
Vestigios de su existencia vana.


A.T.

1 comentario:

  1. Vana existencia, pero mientras se tenga hay que vivir cada día como si fuese el ultimo. Bonito Blogs.

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